27.9.09

San Sebastián 2009: Concha de Oro para el film chino City of Life and Death, de Lu Chan; sin premios para Campanella


SAN SEBASTIAN (Fuente: Agencias).- El actor Pablo Pineda, un malagueño de 34 años que ha sido el primer español con síndrome de Down que obtuvo un título universitario, se ha convertido también en la primera persona con esa enfermedad en ganar la Concha de Plata del Festival de Cine de San Sebastián, en el que la película china City of Life and Death, film de Lu Chuan sobre las atrocidades cometidas por el Ejército japonés durante la invasión de China, ha obtenido la Concha de Oro y Lola Dueñas ha sido elegida mejor actriz -al igual que Pineda- por Yo, también.


Contra todo pronóstico, el cineasta argentino Juan José Campanella, su película El secreto de sus ojos, elegida por la Argentina para competir en los Oscar, y el actor Ricardo Darín se han ido con las manos vacías, ya que la Concha de Plata al mejor director correspondió a Javier Rebollo por el film La mujer sin piano.

El Premio Especial del jurado, que fue presidido por el cineasta francés Laurent Cantet, ha sido para la película francesa Le refuge, de François Ozon, y el Premio FIPRESCI, que concede la crítica internacional, fue para el film español Los condenados, de Isaki Lacuesta.

El jurado, formado también por el director coreano Bong Joon-ho, el actor mexicano Daniel Giménez Cacho, la actriz española Pilar López de Ayala, el director de cine y teatro británico John Madden, la directora iraní Samira Makhmalbaf y la actriz portuguesa Leonor Silveira, ha decido conceder el premio a la mejor fotografía a City of Light and Death y el de mejor guión a la australiana Blessed.

No han sido muy bien acogidos los galardones por parte de la prensa acreditada, que ha abucheado, en su mayoría, las decisiones del jurado.

Entre los premios paralelos, el público ha elegido Precious, de Lee Daniels; y el jurado de los jóvenes ha votado por la turca-alemana The Children of Diyarbakir, de Miraz Bezar.

Palabras del ganador

La vencedora de la Concha de Oro es una película que opta por el blanco y negro para contar uno de los mayores dramas de la historia, la matanza perpetrada por los soldados japoneses en Nanking, al inicio de la guerra chinojaponesa (1937-1945), que dejó más de 300.000 víctimas.

"He intentado mostrar los dos lados, tanto el japonés como el chino, para que se entendiera el dolor de las víctimas y cómo los soldados no dejan de ser meras piezas de un engranaje mayor", indicó Lu Chuan, quien no tiene más que palabras de agradecimiento para la Concha de Oro que le ha otorgado el jurado presidido por Cantet. "Para mi film es fundamental. Me han bloqueado la distribución en la mayor parte de China y me han cerrado la distribución en los certámenes locales. Esta Concha empuja y apoya mi película de una manera que el jurado no es capaz ni de imaginarse".

LISTA COMPLETA DE PREMIOS

Palmarés ofiicial de la 57ª edición del Festival de San Sebastián
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-Concha de Oro a la mejor película: City of Life and Death, de Lu Chan (China).

-Premio Especial del Jurado: Le Refuge, de François Ozon (Francia).

-Concha de Plata al mejor director: Javier Rebollo por La mujer sin piano (España-Francia).

-Concha de Plata a la mejor actriz: Lola Dueñas por Yo, también (España).

-Concha de Plata al mejor actor: Pablo Pineda por Yo, también (España).

- Premio del jurado a la mejor fotografía: Cao Yu por City of Life and Death.

Premio Kutxa-Nuevos Directores:

-Mejor película: Le jour où Dieu est en voyage, de Philippe Van Leeuw (Bélgica). Mención especial: Together, de Matias Armand Jordal (Noruega).

Premio Horizontes:

-Mejor película: Gigante de Adrián Biniez (Uruguay-Argentina). Mención especial: Francia de Israel Adrián Caetano (Argentina).

Premios paralelos:

-Premio TCM del público: Precious, de Lee Daniels.

-Premio TCM del público a la mejor película europea: Desert Flower, de Sherry Hormann (Alemania).

-Premio Gaztea de la Juventud: The Children of Diyarbakir, de Miraz Bezar (Turquía-Alemania).

-Premio Otra Mirada de TVE: Precious, de Lee Daniels. Mención especial: La mujer sin piano, de Javier Rebollo.

Sección Horizontes Latinos

La película uruguaya del realizador porteño Adrían Biniez, Gigante, consiguió el galardón Horizontes, mientras que la cinta argentina Francia, de Israel Adrián Caetano, recibió una mención especial.

Dotado con 35.000 euros (51.000 dólares), de los cuales 10.000 euros (14.600 dólares) son para el director y 20.000 (29.200 dólares) para la distribución en España de la película, el premio fue entregado por el que fuera director del Festival de Cine de San Sebastián desde 1993 hasta 1994, Manuel Pérez Estremera, que presidía el jurado de esta sección.

Gigante retrata la atípica historia de amor entre un hombre corpulento pero tierno que trabaja en como guarda de seguridad en un supermercado que se enamora a través de la pantalla de una empleada del servicio de limpieza.

Además de Pérez Estremera, el jurado de Horizontes Latinos estuvo formado por el director de cine uruguayo Federico Veiroj y la productora holandesa Ilse Hughan, quienes han seguido llenando las vitrinas de un film que empezó su trayectoria en el Festival de Berlín, donde consiguió el Premio Especial del Jurado, el Alfred Bauer y el de mejor opera prima.

Por su parte, la película Francia, de nacionalidad argentina y protagonizada por la actriz y cantante Natalia Oreiro, cuenta a través de los ojos de una niña -la hija del director- la ruptura de un matrimonio que, en cambio, no puede permitirse vivir en casas diferentes.



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25.9.09

"El secreto de sus ojos", el film con que Argentina busca volver a la alfombra roja tras 7 años


El exitoso largometraje de Campanella -un director que ya había alcanzado una candidatura en ese rubro hace 7 años con El hijo de la novia- fue elegido por el voto de parte de los 263 miembros de la Academia local.

La elección se realizó en un acto público en la sede de la Academia (y de la ENERC) ubicada en Moreno 1199, que contó con la presencia del escribano Carlos D’Alessio, de miembros del Consejo Directivo de la Academia, del presidente de la entidad, Pablo Bossi, y de socios de la institución.

El próximo jueves 1º de octubre vence el plazo para que cada país (se calcula que serán más de 60) envíe su candidata. A mediados de enero se conocerá la lista de 9 preseleccionadas en el rubro de mejor película extranjera. El anuncio de las nominaciones en todas las categorías será el 2 de febrero, mientras que los Oscar se entregarán el 7 de marzo.


Lista de precandidatas al Oscar extranjero:

-Argentina: El secreto de sus ojos (dir. Juan José Campanella)

-Armenia, A Magician’s Autumn (dir. Ruben Gevorkyants y Vahe Gevorkyants)

-Austria, For a Moment, Freedom / Ein Augenblick Freiheit (dir. Arash T. Riahi)

-Bélgica, La merditude des choses / The Misfortunates (dir. Felix van Groeningen )

-Bosnia y Herzegovina, Guardians of the Night (dir. Namik Kabil)

-Brasil, Salve Geral / Save General (dir. Sergio Rezende)

-Bulgaria, The World is Big and Salvation Lurks Around the Corner (dir. Stephan Komandarev)

-Canadá, I Killed My Mother / J’ai tué ma mère, de Xavier Dolan

-Chile, Dawson, Isla 10 (dir. Miguel Littin)

-Croacia, Donkey (dir. Antonio Nuic)

-Finlandia, Letters from Father Jacob / Postia Pappi Jaakobille (dir. Klaus Haro)

-Francia, Un prophète / A Prophet (dir. Jacques Audiard)

-Alemania, The White Ribbon (dir. Michael Haneke)

-Hong Kong, Prince of Tears (dir. Yonfan)

-Hungría, Chameleon / Kaméleon (dir. Krisztina Goda)

-India, Harishchandrachi Factory (dir. Paresh Mokashi )

-Irán, About Elly (dir. Asghar Farhadi )

-Japón, Nobody to Watch Over Me / Dare Mo Mamotte Kurenai (dir. Ryoichi Kimizuka)

-Kazajistán, Kelin (dir. Ermek Tursunov)

-Corea, Mother (dir. Bong Joon-ho)

-Lituania, Waterhole / Duburys (dir. Gytis Luksas)

-Luxemburgo, Réfractaire, directed by Nicolas Steil

-Marruecos, Casanegra (dir. Nour Eddine Lakhmari)

-México, El traspatio (dir. Carlos Carrera)

-Holanda, The Silent Army / Wit Licht (dir. Jean van de Velde)

-Filipinas, Grandfather is Dead / Ded na si Lolo (dir. Soxy Topacio )

-Polonia, The Reverse / Rewers (dir. Borys Lankosz)

-Portugal, Doomed Love / Um amor de perdição/Doomed Love (dir. Mário Barroso)

-Rumania, Police, Adjective (dir. Corneliu Porumboiu)

-Serbia, St. George Shoots the Dragon (dir. Srdjan Dragojevic)

-Eslovenia, Landscape No. 2 / Pokrajina St. 2 (dir. Vinko Moderndorfer)

-Eslovaquia, Broken Promise (dir. Jiri Chlumský)

-Sudáfrica, White Wedding (dir. Jann Turner)

-Sri Lanka, Flowers in the Sky / Akasa Kusum (dir. Prasanna Vithanage)

-Suecia, Involuntary / De Ofrivilliga (dir. Ruben Östlund)

-Suiza, Home (dir. Ursula Meier )

-Taiwán, No Puedo Vivir Sin Ti (dir. Leon Dai)

-Tailandia, Best in Time (dir. Youngyooth Thongkonthun)

-Turquía, I Saw the Dawn (dir. Mahsun Kirmizigül

-Venezuela, Libertador Morales, El Justiciero (dir. Efterpi Charalambidis)




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24.9.09

Los fundadores del Grupo de Cine Liberación, a favor de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual


Por la aprobación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual
Por Octavio Getino y Nemesio Juarez (directores) *

Como cineastas, pero antes que nada como simples ciudadanos, queremos manifestar nuestro total respaldo al proyecto que se encuentra en debate público sobre a una nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.

Este proyecto, sujeto sin duda a perfecciones que irán introduciéndose en el propio debate, recoge aspiraciones de la mayor parte de la sociedad argentina frente a una legislación heredada de la dictadura militar y hoy defendida ciegamente por muchos de los que se proclaman partidarios de la libertad y la democracia. Representa aspiraciones como las que estuvieron presentes entre quienes elaboraron pocos años atrás los primeros proyectos para una verdadera democratización de los medios, entre los más representativos, el de los 21 puntos que desde el año 2004 formaron parte de la “Iniciativa Ciudadana por una Ley de Radiodifusión para la Democracia” elaborada por decenas de organizaciones sociales de los servicios de radio y TV y por personalidades de la Cultura, como WACC-AL, COSITMECOS, FATPREN, FARCO, FETRACOM, DAC, entre otros.

Allí se afirmaba: “La radiodifusión es una forma de ejercicio del derecho a la información y la cultura y no un simple negocio comercial. La radiodifusión es un servicio de carácter esencial para el desarrollo social, cultural y educativo de la población, por el que se ejerce el derecho a la información… Si unos pocos controlan la información no es posible la democracia. Deben adoptarse políticas efectivas para evitar la concentración de la propiedad de los medios de comunicación. La propiedad y control de los servicios de radiodifusión deben estar sujetos a normas antimonopólicas por cuanto los monopolios y oligopolios conspiran contra la democracia, al restringir la pluralidad y diversidad que asegura el pleno ejercicio del derecho a la cultura y a la información de los ciudadanos”.

Otro aporte fue el que suscribimos a fines de noviembre de 1988 casi un centenar de cineastas, teleastas y videoastas cuando promovimos el “Foro del Espacio Audiovisual Nacional” donde, con la firma de algunos compañeros que procedían de Cine Liberación y que ya no están entre nosotros –como Gerardo Vallejo y Envar El Kadri-, así como de muchos otros cineastas que aun prosiguen su labor a favor del audiovisual nacional (David Blaustein, Pablo Rovito, Martín García, Eva Piwowarsky, Susana Velleggia, Carlos Galletini, Carlos Obes, Fernando Solanas y Gabriel Arbós, entre muchos otros), se proponía que “los medios deben contribuir al desarrollo de los procesos que hacen a la identidad cultural, al autoconocimiento y a la creación de una cultura nacional con sentido federalista y latinoamericano” y que debería ser prioridad de los mismos “posicionar en términos positivos la imagen de los sectores sociales, regionales y étnicos más relegados, prestando particular atención a los problemas de la mujer y la infancia” para los cual “los medios de comunicación audiovisual requieren de políticas integrales… a través de la concertación entre el Estado, el sector privado y las organizaciones sociales (por lo que) debe incrementarse en términos cuantitativos y cualitativos la presencia de la producción nacional en los medios audiovisuales… a fin de que los mismos incidan en beneficio de nuestro espacio audiovisual y nuestra cultura”. Todo ello para promover un “modelo comunicacional que de deberá estar imbuido de un profundo espíritu social, pluralista, federal, multidireccional y antimonopólico, en el cual puedan participar todos los sectores de la sociedad argentina”.

Han transcurrido más de 20 años de esas últimas propuestas y entendemos que, además de servir para recuperar la memoria, las mismas forman parte o lo están siendo del proyecto de ley que se elevará a su debate en las cámaras del Congreso, por lo que convocamos a directores, autores, técnicos y profesionales de los medios audiovisuales a intervenir activamente en este debate para el logro de una legislación que contribuya a democratizar y mejorar la información y la comunicación entre los argentinos. Será esta una manera de enfrentar los intereses económicos y políticos de todas aquellas fuerzas que sin ninguna ética social ni vocación de servicio público intentan la “sojización” de la cultura audiovisual y de la cultura en general como una manera de defender sus intereses económicos y mediáticos sectorizados, para perjuicio de la mayor parte de nuestro pueblo y del futuro de la Nación. Creemos que el parangón con la soja es válido en cuanto puede arrojar algunas luces sobre la situación actual no sólo porque los que ven peligrar sus privilegios son los mismos que apoyaron al campo para defender los suyos.

Entendemos similares las consecuencias del discurso único, en lo ideológico y en lo cultural actuando oligopólicamente en los medios, como el monocultivo en tanto pérdida de la biodiversidad de los productos de un suelo cuya soberanía última pertenece al pueblo, por un lado y por el otro como pérdida, en un ámbito que debiera compartir la misma soberanía: el Espacio Audiovisual, en tanto renuncia al enriquecimiento cultural que proporciona el acceso a la diversidad de productos culturales que son expresión de las multifacéticas expresiones populares en el ámbito de nuestro territorio, así como a la que potencialmente podríamos acceder de otros pueblos del mundo.

Se hace necesario señalar que la promulgación de esta Ley garantiza en el Espacio Audiovisual la aplicación del compromiso emanado de la Convención sobre la Diversidad de las Expresiones Culturales de la UNESCO, que el Congreso ratificó el voto gubernamental en aquella Convención, en cuya discusión la representación argentina de las Entidades de la cultura agrupadas en el Foro para la Defensa de las Industrias Culturales tuvo una decisiva actuación.

Esperamos un voto positivo para esta Ley, porque si la consecuencia del fracaso de la resolución 125 originará, por la explotación intensiva, la desertificación paulatina de nuestro suelo; el fracaso de esta Ley –para terminar con el parangón sojero- tendrá como consecuencias la profundización de la esterilización de las conciencias de nuestro pueblo anulando su capacidad de expresar su identidad y de enriquecerla con la proveniente de otros pueblos.


* Octavio Getino y Nemesio Juárez, cineastas, co-fundadores de lo que fueron el Grupo de Cine Liberación y el Espacio Audiovisual Nacional.

18.9.09

Ray Loriga habla de 'La pistola de mi hermano': "Utilizo la ficción como quien cuelga su saco en el perchero de otro"


Ahora es Ray después de la película, diferente al que era. Más arrogante y valiente, mejor guarecido en su mundo de poesía febril. "La adolescencia no tiene que ver con la sordera, la adolescencia me toca", dice Ray que ahora es director.

Escribe libros que se leen y también se escuchan y se miran, parecen escenas de un filme y suenan a veces como una canción. Sus referentes literarios son americanos y su primera película descubre que la nouvelle vague francesa vino de Tokio. Tiene ese aspecto de chico duro y machito, y es un tímido bueno, feminista si le apuran. Ray Loriga, que se llama Jorge (Madrid, 1967), es un ser radicalmente disperso, militante sin remedio de un punkismo sentimental: le revienta la cobardía de emociones. Tiene un poso de infancia en una España todavía triste, sobrevivió al machismo escolar, los niños sin más que hacer que retarse a la rama más alta, a ver si te rompes la crisma:

-"A que no saltas desde la rama.
-No.
-Mi hermano era un genio evitando desafíos". (Diálogo de Caídos del cielo, la novela de Ray que en el cine le ha llamado La pistola de mi hermano).

A partir de ahí, hizo lo que le dio la gana, también sus personajes, que matan por no ser quien no quieren ser, porque tienen pistolas, sus personajes poetas. No es que esté de moda matar, dice Ray que los catastrofistas de la actualidad son ciegos de la Historia, "lo único que ocurre es que hoy la gente mata a título individual". Tampoco es que la tele dirija nuestras vidas; la tele, dice Ray, "la tele ha tocado techo, pronto la veremos como quien escucha radio fórmula para planchar".

-"¿Por qué no te vas a Japón?
-Me voy a ir.
-Allí nadie te conoce, no te darán la lata".

Se lo dice un personaje a otro, así empieza la película. Quien se va a Japón es Ray. Japón siempre estuvo a vueltas en su cabeza. Él parece cada vez más un samuray. Ya no boxea, antes boxeaba, ahora hace tai-chi. Sus diálogos son como balloms de un cómic manga. A lo mejor no vuelve de Japón Ray Loriga, Japón te permite ser adolescente, fino y menudo, aséptico toda la vida.


-Todo el mundo querrá preguntarle lo mismo, ¿cómo se hace uno director de la mañana a la noche?
-No ha sido tan accidental como parece, yo siempre he pensado en hacer cine. Al mismo tiempo que escribía, me he formado en las filmotecas, y he ido buscando películas extrañas por todo el mundo. Pero la dirección me cayó del cielo, hablaban de comprar los derechos y un día me la ofrecieron. Puse en una mano el miedo y en otra la pasión: ganó la pasión con grandes dosis de miedo.

-De todas formas, sus libros nunca han tenido un público especialmente lector, sino gente interesada por la música y el cine, puede que también por la poesía.
-Es cierto, es un público a medias. Los editores suponían que era un sector de gente que no leía, que no contaba, pero se demostró que sí, que ahí había un hueco para la literatura, y eso me ha hecho especial ilusión.

-¿Por eso no le dio pudor utilizar su rostro en la portada de uno de sus libros?
-Eso es más habitual de lo que muchos han querido decir. Sí, la verdad es que fue un gesto. Bob Dylan es un escritor fabuloso, mejor que muchos literatos, y su rostro sale en todas las portadas de sus discos. Además, Héroes era casi un disco, eran las canciones que uno oye en su cabeza, y el narrador era yo: me pareció una jugada honesta.

-¿Le gustó convertirse en un fenómeno, casi como un cantante de rock?
-Era un poco lo que significaba ese libro. Entre mis referencias se compatibilizan perfectamente Kerouac con Bob Dylan o con Ginsberg, o Patti Smith con Rimbaud. El rock and roll no es sólo música, es cine, es literatura, es pintura, hay una conexión entre todo.

-Sus tres primeros libros fueron marcadamente autobiográficos, y en el cuarto se decidió por una novela de género. La impresión es que Ray sigue ahí, entre el narrador y el protagonista.
-Sí, el personaje que yo he sido en libros anteriores se desdobla entre los dos hermanos, el que soy y el que me gustaría ser. Utilicé la ficción como quien cuelga su traje en la percha de otro, y esto te da una tranquilidad para escribir.

-¿De dónde le surge ese interés por la relación fraternal, tan tierna?
-Siempre me han gustado las historias de hermanos. Yo tengo un hermano prácticamente de mi edad, crecimos juntos, y ese lazo que se establece entre hermanos, que tú matarías por tu hermano y él, por ti, ese compromiso por encima de la amistad, esa nobleza inquebrantable, me interesa muchísimo.

-Ray, ¿todavía se siente al margen de las ilusiones comunes?
-Sí, casi más al margen que nunca. Conforme vas pudiendo acotar tu jardín y te va creciendo, cada vez necesitas menos del jardín de al lado. La ira puede ser menor, porque cuando empecé a escribir venía de participar en un mundo que no me gustaba, y en cambio ahora, estoy donde me gusta.

-¿No es más fácil renunciar a las cosas cuando ya se tuvieron?
-A mí no me gusta presumir de marginal, precisamente por eso: es muy fácil ser marginal cuando es una opción propia, lo difícil es cuando no tienes más cojones. Tampoco creo que uno deje de ser lo que era porque su público aumente, uno empieza a la contra y acaba teniendo público. La razón de la cultura underground es el rechazo, pero también hay mucho cuento: las obras hay que juzgarlas, los prejuicios son las razones de los estúpidos.

-Decía Ray Loriga en una entrevista: No llevo anillos y tatuajes por esnobismo, significan una postura radical ética.
-Son tres palabras que nunca he dicho juntas. Postura es un horror, ética es peligroso y ¿radical?: yo no soy un radical, soy una persona abierta a estímulos diferentes y quizá excesivos, sólo soy radical de la dispersión. Los tatuajes y los anillos no son más que una estética.

-¿Le da mucha importancia al aspecto físico?
-Para casarme con alguien, sí; para leer un libro, no. No creo que a Dostoievski le sentaran muy bien unos vaqueros ajustados, pero me trae al pairo.

-¿Y al suyo personal?
-Sí, al mío sí, pero no paso mucho tiempo en las tiendas. Tengo la impresión de llevar toda mi vida de escritor defendiéndome de mi estética, no le doy más importancia a mi atuendo que otros a su corbata y a su traje.

-En Caídos del cielo, ¿hay un homenaje al punkismo sentimental que significó la película de Dennis Hopper y antes el tema musical de Neil Young, cuyo título han ido robando?
-La película, claro, es una de mis referencias, me entusiasma. Parece que el cine adolescente lo inventó Tarantino, y no, hay una falta de memoria... Me interesa eso que llamas punk sentimental: me identifico absolutamente con esa especie de violencia sentimental.

-Sin hacer sociología, la película de Hopper, ¿puede resumir el espíritu de una generación fuera de juego?
-Nunca me he vinculado con esa tendencia sociológica. Lo que sí es cierto es que la película puede enganchar con cierta sensibilidad que no pasa con los años, igual que Rimbaud es el mito de la adolescencia creadora. Yo no creo que con mis libros se pueda estudiar a una generación, yo no sé donde va la gente, ni siquiera sé adónde voy yo, no soy ningún flautista de Hamelin.

-Estados Unidos nos contagió el miedo al sida y ahora exporta la paranoia del asesino circunstancial: te mato porque tengo una pistola.
-La pistola en mi película es un pretexto, de hecho no me interesa el asunto de las pistolas, me interesa la violencia como punta armada de una ira adolescente. El chico en realidad mata una cierta maldad que hay escondida detrás de mucha gente, él mata a quien no quiere ser, al concepto machista, la falta de respeto que hay en cierta manera de mirar a las mujeres. Pero es sólo metáfora, si no yo cogería una pistola en vez de hacer películas. La literatura siempre se ha apoyado en los crímenes, en las traiciones, en los asesinatos. Todo era por celos, o por tierras y conquistas, lo que fuera, igual de absurdo. Matar por Francia no es más noble que matar por tu madre o porque sí. Yo creo que no hay nada más absurdo que tirar una bomba atómica sobre Hirosima y matar a un millón de personas que ni siquiera sabes quiénes son.

-No deja de ser paradójico que mientras usted rodaba la película, un tipo de Burgos protagonizaba un asesinato triple por azar, seguido de road movie, que podría parecerse a su argumento.
-La relación es mínima, aunque sí, existe. Pero yo soy muy torpe para las lecturas sociológicas, hay cosas que no sé cómo leer, como todos estos asesinatos de niños, y la prostitución infantil que se da en la Europa ultracivilizada: aterrador. No sé cómo relacionarlo con lo real, si son unos dementes aislados o si es algo que se genera socialmente.

-¿Cree que las cosas suceden así, sin explicación, sin orden, porque sí?
-También sucede que nos llenan las cafeterías con unos tipos con pistola con los que hay que convivir, o que te tratan como un criminal por el hecho de no tener un aspecto que agrade.

-Su público esperará encontrar al Tarantino español, sin embargo, su película parece más la réplica europea y aséptica al ketchup americano.
-Es radicalmente europea. A mí me entusiasma el cine americano, y Scorsese, pero se ha copiado tanto. La libertad se ha convertido en un concepto económico: se permite lo que vende.

-Además de evitar mostrar la sangre, tampoco es explícito con el sexo.
-Son opciones de estilo. Está construida a base de pequeñas elipsis, es muy interesante lo que no se ve. El sexo se convierte en una tensión alargada y constante que no llega a ser explícita, y tiene mucho que ver con el sexo adolescente, cuando la idea ocupa mucho más que el sexo en sí mismo. Me revienta y me revelo contra el sexo de anuncio: suena una música y dos tíos empiezan a follar, a agarrarse a las lámparas con unas posturas tan sofisticadas.

-Ray, ¿por qué siempre elige mujeres duras pero que con cierto aspecto débil, como si demandaran protección?
-Yo creo que soy yo el que demanda cierta protección física.

-¿Pero usted no era boxeador?
-Eso no basta con las mujeres, las mujeres pegan golpes invisibles que no los ves venir. Tengo un gran respeto por las mujeres, "los negros del mundo", como dijo Lenon; y encima ahora dicen que el feminismo está pasado, mientras ellas siguen siendo maltratadas social y físicamente. En mi obra, la mujer nunca es un componente anecdótico o sexual ni nada similar. Me gustan las mujeres inteligentes, como me gustan los escritores inteligentes. Soy un combativo defensor de la igualdad absoluta, y no creo que las mujeres tengan que convertirse en algo tan bruto como los hombres, unos tipos con bigote que se sientan a tu lado a comentarte el fútbol. A la igualdad se llega respetando la diferencia, no imponiendo una clonación.

-Debajo de esa apariencia de duro e incluso violento que muchos le figuran, es usted un tipo muy sensible, bueno.
-No soy un tipo duro, no entiendo por qué tengo esa fama. Sí soy sentimental, aunque la palabra me dé grima. Mi abuela decía una frase que me encanta: "Se pusieron sentimentales, que es lo que hace la gente sin sentimientos".

-¿Tuvo problemas por ser un adolescente sensible?
-Tenía problemas porque no me gustaba lo que tenía alrededor. Hay una edad en que las cosas son obligatorias, como hacer la primera comunión o estudiar derecho o correr un maratón, y lo peor es que a mucha gente esa edad se le prolonga hasta la muerte, y siempre hace lo que se le supone.

-¿Siempre ha hecho lo que ha querido?
-He intentado sacudirme los pensamientos que no eran míos, que es la forma de tratar luego de hacer lo que quieres. Yo creo que la libertad es algo mental, no tanto de acción.

-¿Y en cambio, se siente obligado a mostrarse frío?
-Si uno escatima las pasiones se produce una demanda. Por saturación, se produce el efecto contrario. Pero hay una frialdad, un cinismo al que ahora la gente se siente obligada, que no me parece positivo: es muy fácil, te salva de definirte, pero hay que tener cojones y decir: yo defiendo esto.

-¿Será que ya nada emociona?
-Será cobardía emocional, y a mí me revienta. La gente ha de tomar una opción, sobre todo aquéllos que crean. A la guerra hay que ir con algo, además no es justo que si yo llevo algo tú no lleves nada, porque entonces nos reímos sólo de mí y eso no tiene gracia.


(publicado en http://www.elmundo.es/larevista/num95/textos/ray1.html)



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14.9.09

Venecia 2009: León de oro para la israelí "Líbano"; Todd Solondz, mejor guión por "Life during wartime"


La película Líbano/Lebanon, dirigida por el israelí Samuel Maoz, obtuvo este sábado 12 el León de Oro de la 66ª edición de la Mostra de Venecia. El presidente del jurado, Ang Lee, fue el encargado de anunciar el premio para este alegato antibelicista que relata 24 horas en la vida de un grupo de jóvenes soldados en el interior de un tanque durante la primera guerra del Líbano.

Líbano es una historia muy personal, basada en los recuerdos del director, hoy de 47 años, y con la que ha tratado de acabar de una vez con los demonios que su participación en la guerra le crearon en 1982.

"Necesitaba distancia para usar esos sentimientos, esos recuerdos, como director", explicó Maoz al presentar un film en el que el miedo a participar en la guerra es el punto en torno al que giran los actos de los protagonistas.

La historia se sitúa en el Líbano pero podría desarrollarse en cualquier guerra y en la que los protagonistas son un grupo de veinteañeros –los actores Michael Moshonov, Yoav Donat, Itay Tiran Oshri Cohen y Zohar Strauss- sin ninguna experiencia militar, aterrados por lo que están viviendo y preguntándose a cada segundo qué hacen allí.

Al recoger el premio, Maoz dedicó el galardón a "las miles de personas en el mundo que vuelven de la guerra”. “Como yo, vuelven aparentemente bien. Se casan y tienen hijos pero en su interior permanecen vacíos en sus almas", ha añadido un director feliz que ha acabado su discurso al grito de: "¡Viva el arte cinematográfico. Viva Venecia!".

Por su parte, el actor británico Colin Firth fue galardonado con la Copa Volpi a la Mejor Interpretación Masculina por su papel protagónico de George Falconer -un profesor homosexual de 52 años que da clases en Los Ángeles y que sufre por el recuerdo de su novio, fallecido en un accidente de tráfico- en la película A Single Man, debut en la dirección del modisto estadounidense Tom Ford.

"Este país me ha inundado de regalos. Me ha dado la cultura, la literatura, el cine, el arte y la cocina, la grappa [bebida] y me ha dado, incluso, una mujer bellísima y dos niños maravillosos", ha dicho un emocionado Firth en referencia a Italia, país en el que se celebra la Mostra.

La iraní Shirin Neshat logró el León de Plata a la mejor dirección por su ópera prima Women Without Men, una historia que se desarrolla en el Teherán de los años cincuenta y crítica duramente la situación de la población y, en especial, de las mujeres.

Neshat, que ha acudido a la ceremonia de entrega de premios con un pañuelo verde -color que han adoptado los seguidores del proreformista Mirhusein Musavi-, dedicó el premio a "la libertad y la democracia".

"Es un mensaje al mundo y a mi país [Irán], que ha estado luchando por la democracia y la libertad desde hace cuarenta años", afirmó una emocionada Neshat.

La otra gran protagonista de la ceremonia de clausura fue la rusa Kseniya Rappoport, galardonada hoy con la Copa Volpi a la Mejor Interpretación Femenina por su trabajo en La doppia ora, del director italiano Giuseppe Capotondi.

Rappoport interpreta a una misteriosa empleada eslovena de un hotel de Turín que participa en una trama de robos para conseguir el dinero necesario para empezar una nueva vida en Buenos Aires, en esta ópera prima del cineasta italiano que hasta ahora había dedicado su carrera a la dirección de vídeos musicales. "Perdonen mi agitación, me siento como si estuviera volando en un paracaídas y no consiguiera abrirlo. Querría agradecer al director de la Mostra por haber elegido esta opera prima en concurso. Querría agradecer a todos los productores también", dijo la actriz, protagonista también del film La desconocida (2006), de Giuseppe Tornatore.

El Premio Especial del Jurado fue para la comedia Soul Kitchen, del alemán de origen turco Fatih Akin, que cuenta la historia de Zinos (Adam Bousdoukos), el joven propietario de un restaurante popular en el que la calidad de la cocina brilla por su ausencia.

El Premio Marcello Mastroianni al o la intérprete revelación fue para la italiana Jasmine Trinca por Il grande sogno, de Michele Placido, mientras que los Osella al Mejor Guión y a la Mejor Contribución Artística fueron, respectivamente, para el director estadounidense Todd Solondz, por Life During Wartime, y para la escenógrafa Sylvie Olivé por Mr. Nobody, del belga Jaco Van Dormael.

Finalmente, el Premio Venezia Opera Prima Luigi De Laurentiis recayó en Engkwentro, de Pepe Diokno (Filipinas), que también ganó la sección Orizzonti; y el galardón Controcampo Italiano fue para Cosmonauta, de Susanna Nicchiarelli.

Lista completa de premios

-LEON DE ORO AL MEJOR FILM: Lebanon (Líbano), de Samuel Maoz (Israel).

- LEON DE PLATA AL MEJOR DIRECTOR: Shirin Neshat por Zanan bedoone mardan/Mujeres sin hombres (Irán)

-PREMIO ESPECIAL DEL JURADO: Soul Kitchen, de Fatih Akin (Alemania).

-COPA VOLPI AL MEJOR ACTOR: el inglés Colin Firth por A Single Man, de Tom Ford (EE.UU.)

-COPA VOLPI MEJOR ACTRIZ: la rusa Ksenia Rappoport por La doppia ora, de Giuseppe Capotondi (Italia)

-PREMIO MARCELLO MASTROIANNI A LA MEJOR ACTRIZ EMERGENTE: Jasmine Trinca por Il grande sogno, de Michele Placido (Italia)

-PREMIO OSELLA AL MEJOR GUION: Todd Solondz por Life During Wartime (EE.UU.)

-PREMIO OSELLA A LA MEJOR CONTRIBUCION TECNICA: Sylvie Olivé por la escenografía de Mr. Nobody, de Jaco Van Dormael (Bélgica-Francia)

-LEON DEL FUTURO "LUIGI DE LAURENTIIS" A LA MEJOR OPERA PRIMA: Engkwentro, de Pepe Diokno (Filipinas)

-LEON DE ORO CORTO CORTISIMO: Eersgeborene (Primer nacido), de Etienne Kallos (Sudáfrica-EE.UU.)


Otros premios:
-PREMIO SECCIÓN ORIZZONTI: Engkwentro, de Pepe Diokno (Filipinas).

-PREMIO ORIZZONTI-DOCUMENTAL: 1428, de Haibin Du (China)

-PREMIO SEMANA DE LA CRITICA: Tehroun, de Takmil Homayoun (Irán)

-PREMIO PERSOL AL MEJOR FILM EN 3-D: The Hole, de Joe Dante (EE.UU.)

-QUEER AWARD AL MEJOR FILM DE TEMATICA HOMOSEXUAL: A Single Man, de Tom Ford (EE.UU.)

-PREMIOS FIPRESCI DE LA CRITICA INTERNACIONAL. Mejor película de la Sección Oficial: Lourdes, de Jessica Hausner. Mejor película de la Sección Orizzonti o de la Semana Internacional de la Crítica: Choi Voi, de Bui Thac Chuyen.

-PREMIO SIGNIS: Lourdes, de Jessica Hausner.

-PREMIO LABEL EUROPA (a la mejor película europea de la sección Venice Days): The Last Days of Emma Blank, de Alex van Warmerdam.

-PREMIO PEQUEÑO LEÓN: Capitalism: A Love Story, de Michael Moore.

-PREMIO UNICEF: Women Without Men, de Shirin Neshat.

-PREMIO UNESCO: Bad Lieutenant: Port of Call New Orleans, de Werner Herzog.

PREMIO DE LA JUVENTUD: Soul Kitchen, de Fatih Akin.





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10.9.09

Venecia 2009: así es el encuentro de dos grandes, Werner Herzog y David Lynch


(Por Manuel Yañez Murillo, para otroscines.com)

En un notable acierto del equipo de Marco Müller, el pasado viernes, la Mostra invocó a ese maravilloso triunvirato de chiflados del cine contemporáneo que forman Werner Herzog, Abel Ferrara y David Lynch. Dicha “aparición” se produjo gracias a la presentación de My Son, My Son, What Have Ye Done y The Bad Lieutenant: Port of Call New Orleans, las dos películas que han convertido a Herzog en el primer director en situar dos films en competencia en una misma edición del Festival de Venecia. A pesar de sus importantes diferencias, estas dos magníficas películas comparten una excéntrica aproximación al universo de la demencia urbana (suburbial en el caso de My Son…). Son largometrajes que, ambientados en el corazón de una América mítica y pesadillesca, rebuscan en el modo en que el contexto social responde ante los trastornos psicológicos de sus habitantes. “En el mundo actual, la supervivencia pasa por la locura”, parecen decir estas películas cargadas de cruda ironía y proclives al esperpento.

El más brillante de estos filmes es The Bad Lieutenant…, la particular revisión/variación que acomete Herzog de la película Un maldito policía, que Abel Ferrara rodó en 1992. Espléndidamente protagonizada por uno de los peores actores del panorama actual, Nicolas Cage (cuyo incontenible histrionismo es hábilmente explotado por Herzog), la película sitúa su ámbito de acción en la Nueva Orleans post-huracán Katrina, convirtiendo la ciudad (sus calles, hoteles, casinos, suburbios y cementerios) en un agente narrativo primordial. En este escenario, Herzog lleva a cabo una disección alucinada de los códigos del cine policíaco. El denso y trepidante guión de William M. Finkelstein permite al director alemán aferrarse sin miedo a los pilares de la narrativa clásica y a los arquetipos del género negro (cerca, por ejemplo, del James Gray de Los dueños de la noche/We Own the Night). A la postre, son estos sólidos cimientos los que permiten a Herzog construir el truculento, eufórico y lisérgico universo por el que transita Terence McDonagh (Cage), un teniente de policía que se sume en el pozo de la drogadicción por culpa de un dolor de espalda crónico.

La mano del director de Stroszek se deja ver en la exploración de la animalidad del personaje de Cage y en sus hilarantes brotes psicóticos, el más memorable de los cuales lleva al protagonista a exclamar “Shoot him again, his soul is still dancing!” (¡Dispárale otra vez, su alma todavía baila!), a lo que sigue un plano del “alma” en cuestión bailando break-dance. Finalmente, la diferencia más importante de la película de Herzog respecto a la de Ferrara es la ausencia del referente religioso que determinaba el declive y redención del teniente corrupto al que daba vida Harvey Keitel. En The Bad Lieutenant…, la redención llega de la mano del azar (una conclusión que recuerda a otro film de Ferrara, Go Go Tales) y tiene más que ver con el absurdo y caótico (des)orden social que con una regeneración espiritual, un cierre que pone de manifiesto la combinación de fina sátira y afilado cinismo que recorre todo el film.

Por su parte, My Son, My Son, What Have Ye Done (título de resonancias religiosas) se inspira en una historia real para relatar los acontecimientos que conducen hasta un dramático parricidio en un barrio residencial de San Diego. Planteada como un lúdico ejercicio sobre la dialéctica que forman lo absurdo y lo sublime, resulta clave advertir que la película cuenta con la participación de David Lynch como productor ejecutivo. Así, los desvaríos esquizoides del protagonista, Brad McCullum, interpretado por Michael Shannon, se cruzan con las atmósferas oníricas del universo-Lynch (que también aporta a la película una de sus actrices fetiche, la siempre inquietante Grace Zabriskie, la viejecita de INLAND EMPIRE). No sólo eso, el film también ahonda en la furia irracional que se oculta tras el aparente bienestar de la Norteamérica suburbial, un tema recurrente en la filmografía de Lynch.

En este caso, la firma de Herzog se materializa en las fugas psicogénicas que agujerean el relato y dotan al conjunto del film de una inquietante aura mística (principalmente, el viaje a Perú del protagonista). Además, la película desarrolla una interesante subtrama con trasfondo mitológico en la que un grupo de teatro amateur representa la vida de Orestes, cuestión que, junto a la psicosis religiosa de Brad, desencadena el fatal desenlace de la historia. En conjunto, y a pesar de la esporádica afectación de ciertos pasajes (la búsqueda de lo grotesco alcanza límites insospechados), la película posee una fuerza emotiva que tiene tanto de epifanía trágica como de comicidad surrealista.



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9.9.09

Habla el húngaro Gyorgy Palfi: "El hombre es más que un ser biológico"


En el programa 128 de Rastros de Carmín hablamos de Hukkle (2002), ópera prima del realizador húngaro Gyorgy Palfi. A continación, un fragmento de una entrevista realizada en 2006 tras el estreno de Taxidermia -su segundo largometraje-, y el trailer del film.

Extracto de una entrevista realizada por Lorenzo Codelli y Hubert Niogret (Revista Positif, septiembre 2006). Perdonen si la traducción es un poco salvaje.

En Taxidermia las escenas comienzan siempre con un plano muy fuerte. ¿Cómo rueda usted: improvisando en el plató, o bien, a partir de un elemento central que desea valorizar?

El punto de partida, es el significado de la escena. Al momento del rodaje, un guión es algo concreto que no puede, casi, ser modificado. Para rodar en Hungría no se cuenta con mucho tiempo porque no hay demasiado dinero. Es necesario saber exactamente lo que se rueda cada día. Sólo se improvisa cuando la cámara no puede ubicarse donde lo habíamos previsto y hay que encontrar una solución que se aproxime a la idea inicial. Con el cameraman, dos semanas antes del rodaje, visitamos varias veces los lugares para definir bien nuestras necesidades (…). Nosotros contábamos con 45 días para el rodaje de Taxidermia.

¿Utiliza un storyboard?

No, los planos los hago yo y el cameraman. Durante la preparación del rodaje utilizamos sólo storyboards cuando el plano puede resultar complicado para los técnicos.

Taxidermia es una película en tres partes, con tres personajes y sobre tres generaciones y con tres temáticas: el sexo, las entrañas, el cuerpo. Una concepción triple.

En la historia del arte existe esta concepción triple. Al comienzo, habíamos pensado a la estructurada de una novela de familia que abarcaría al nieto, el padre y el abuelo. Dentro de esta estructura de saga familiar, la primera generación se funda la familia, la segunda la lleva al éxito y la tercera destruye todo convirtiéndose en artista. El film parece mucho más largo que eso: es toda la historia de la Hungría comunista. Desde el comunismo de guerra, la solidaridad entre los países del bloque socialista hasta llegar a la desaparición del comunismo remplazado por el consumismo. La mística de la ideología desaparece, la mística del cuerpo la remplaza. Para mi, el punto de partida de la película es personal y no histórico. Habla inevitablemente de los periodos que mi padre y abuelo han vivido, pero yo vivo el presente. A través de esta historia de identidad hemos tenido la oportunidad de mostrar también la historia del país. He tratado de encontrar el ritmo, la significación exacta de las épocas históricas que se relatan en el film.

El comunismo es mostrado a través de un prisma grotesco. Grotesco vulgar en la primera parte de la historia, grotesco irónico en la segunda parte y grotesco trágico en la tercera. . Una visión terrorífica, de una negación total.

Lo más difícil era describir la ultima parte y en sólo 30 minutos. Me asuste al ver lo negro que se volvía todo. Pero espero que no sea percibido como una negación total. El fin, es el de esta familia que se ha enraizado en esta estructura. Tenía que llevar la historia hasta el final. La película trata de responder a la pregunta: el hombre no es sólo un ser biológico. ¿Qué es lo que lo distingue? Su historia, su identidad.


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