15.3.10

Santiago Loza habla de "Rosa Patria", el documental que rescata la figura del poeta y activista Néstor Perlongher


Con un nombre establecido en el cine argentino con títulos como "Extraño" y "Cuatro mujeres descalzas", Santiago Loza presentó en la sección oficial argentina del Bafici su más reciente película, "Rosa patria", un documental centrado en la figura del poeta y activista argentino Néstor Perlongher (1949-1992), que se llevó el Premio Especial del Jurado.
El film busca explorar su faceta de militante en el Frente de Liberación Homosexual, el cual perturbaba a la derecha pero también a la izquierda machista de los años 70, que es utilizado como hilo conductor para hablar de lucha, dictadura, persecución, SIDA, exilio y arte, entre otros temas que arroja un personaje cuya vida fue en paralelo a algunos de los momentos más importantes de la historia argentina.

Explica Loza que para este primer documental buscó un tratamiento similar al de una ficción: "Tiene el mismo rigor en la puesta. Cada entrevistado tiene su puesta de luces. Fue el mismo trabajo e insumió un tiempo de trabajo muy grande. No hay actores que interpreten a Perlongher pero hay algo que remite a eso. Para mí es una más de mis películas. No la veo como algo menor".

La presentación de "Rosa patria" en Bafici coincidió justamente con la etapa de posproducción de su nueva ficción, "La invención de la carne", una película que planea desde hace cuatro años y que finalmente llegará a pantalla en este 2009.

- Cuando comenzás a desarrollar el proyecto, ¿qué fue lo que te interesó narrar en primer término: el personaje, el contexto o el tema de fondo?

En realidad comienza el proyecto cuando se unen. Yo conocía al poeta, por otro lado conocía la historia de que había un Frente de Liberación Homosexual en la Argentina, también siempre quise hacer algo sobre la dictadura. Cuando fue la dictadura yo era chico, y siempre me quedó como las ganas de hacer algo. Cuando descubro que Perlongher había sido militante del frente y uno de sus líderes, y conozco un poco la vida él, me pareció que era una historia para una película.
Más allá del documental me parece que podría ser una gran ficción. Tuvo una vida atravesada por sucesos históricos argentinos: la dictadura, la militancia de los 70, la post-dictadura, la aparición del SIDA, la guerra de Malvinas, la primavera alfonsinista, tener que irse. Era poeta, militante, activista, un ateo que termina escribiendo loas a un Dios. Un tipo que peleó por todo termina siendo parte de un sistema religioso de una secta brasileña y en un exilio casi sintiendo el fracaso de lo que él había peleado. Era contradictorio. Un personaje un poco passoliniano.

- Considerando que su historia podía ser una gran ficción, ¿por qué decidiste hacer un documental?

Porque empiezo a conocer gente que había participado de la experiencia y no había dado su testimonio en otros documentales previos. Era darle voz a gente que había estado bastante silenciada o como en una lucha invisible. Y me parecía que yo lo que iba a hacer era como un boceto para una futura película, como un borrador. Que la película iba a ser la búsqueda, y algo de eso está.

- ¿Qué me puedes decir de la puesta en escena?

Cuando nos ponemos a trabajar nos damos cuenta que no hay material de archivo. Hay alguna foto pero los archivos se han perdido, se han quemado o roto por miedo. Entonces era como un pasado que no se podía construir, y teníamos pocos recursos para poder construir. Y había algo de la estética de Perlongher que me parecía interesante, como tomar algo de cierto kitsch y hacer una especie de teatrito berreta donde se intentara reconstruir algo de ese pasado. Donde estaba el intento de reconstruir ese pasado y la imposibilidad de reconstruirlo.

- Hay un testimonio que es llamativo porque quien habla aparece a oscuras de espaldas a la cámara, sin querer revelar su identidad, algo que resulta anacrónico...

Fue un personaje que no quería estar de frente a la cámara porque tiene un cargo público y eso lo compromete de algún modo. La opción era no tenerlo o tener el off, pero me pareció bueno tenerlo de espaldas, que sus manos expresan tanto como su cara. Es Marcelo, un amigo de él. Y me parecía que era un testimonio clave y decidí que estuviese en cámara. Cuando uno escucha las acciones que ellos tenían resultan muy ingenuas. Pero en el momento todo eso que parece un juego de chicos era peligroso, y algo de esa secuela habrá quedado en alguno de ellos.

- Que no quiera dar a conocer su identidad por verse comprometido da cuenta que pese a que no hay persecución hay vestigios en la sociedad de ello, ¿cómo comparas la lucha del homosexual de entonces con el de ahora?

Me parece que lo que ha sucedido en el presente es casi lo contrario de lo que ellos proponían.
Lo que planteaba Perlongher es que la homosexualidad era parte de una revolución mucho mayor que era una revolución que venía a corroer los parámetros de una sociedad burguesa. Y de algún modo la lucha de hoy de los homosexuales es una lucha que trata de incorporarse a esa sociedad burguesa. Hay algo de esa lucha que no es la misma. Cuando se piensa que algo se superó, ¿realmente se superó o fue absorbido por un sistema?

(Extraido de http://www.cinestel.com/43001/709225.html?*session*id*key*=*session*id*val*)

.

No hay comentarios: