Diario del Bafici - Día #1

LEYENDO 'EL LIBRO DEL BLOQUEO'
(Читаем "Блокадную книгу")
Dir. Alexander Sokurov (Rusia, 2009, 96')


Mmmm no es la película que recomendaría para empezar un festival. Mucho menos un jueves al mediodía, sabiendo que a la salida de la sala restan muchas obligaciones antes de concluir el día. En realidad es una peli que le recomendaría a muy pocas personas. Y no porque sea mala, precisamente.

La cosa es así: en septiembre de 1941, durante la segunda guerra, los alemanes quisieron tomar Leningrado (hoy llamada San Petersburgo). Los 3 millones de habitantes construyeron una férrea defensa de su territorio, que se volvió casi inexpugnable. ¿Qué decidió Hitler entonces? Bloquear la ciudad, sitiarla, para que sus habitantes murieran de hambre y frío. El sitio duró casi ¡tres años!, y la población de Leningrado tuvo que recurrir a los más insólitos mecanismos para lograr sobrevivir.

Sokurov toma un texto de los años '60 escrito por Daniil Granin and Ales Adamovich, en el que se relatan los testimonios de los sobrevivientes al Sitio. Y junta a una población bastante heterogénea (en edades, profesiones, etc) para que seleccionen y lean fragmentos de ese texto, titulado "El libro del Bloqueo". Ahí se narran en detalle las peripecias para la supervivencia, que incluyen desde caldos con pegamento y sopas de cinturones de cuero, hasta la misma antropofagia. El Sitio terminó con más de un millón de muertos, el 18 de enero de 1944.

La peli de Sokurov emplea ese único recurso casi en la totalidad de su metraje: las personas seleccionadas leen fragmentos del texto. Y entregarse al placer de escuchar un relato puede resultar fascinante. El tema es que los que no hablamos ruso no podemos "escuchar" el relato, lo tenemos que leer. Y en ese ejercicio casi excluyente de seguir el subtitulado nos preguntamos (o al menos eso hacía yo) si no sería más práctico tener el libro a nuestra disposición y ya...

La pregunta que plantea el film sobre su epílogo (¿por qué traer al presente esas descarnadas historias de luchas por sobrevivir hace casi 70 años?) y la falta de una respuesta concreta a ese interrogante, parecen resignificar los testimonios que se acumulan durante más de una hora y media de lectura, y consigue trasladar al aquí y ahora un hecho histórico que muchos olvidaron y que otros directamente ni conocen.

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